La ciudadanía exige un gabinete técnico y sin conflictos de interés al presidente electo José Antonio Kast, junto con medidas inmediatas en materia de seguridad, según revela la última edición de la encuesta Data Influye, elaborada por la consultora Tú Influyes.
El sondeo entrega un primer panorama de las expectativas ciudadanas respecto de la conformación del futuro equipo ministerial del mandatario electo, donde la probidad y las capacidades técnicas aparecen como los factores más valorados por la opinión pública para el inicio del nuevo gobierno.
De acuerdo con los resultados, un 57% de los encuestados prioriza que el gabinete esté integrado por personas sin conflictos de interés (36%) y con un perfil técnico (21%). Estas características superan ampliamente otros atributos considerados secundarios, como la formación académica (9%), la experiencia política (8%) y la moderación (7%), lo que refleja una demanda ciudadana por un enfoque más profesional y menos ideológico en la gestión pública.
En paralelo, el estudio evidencia una fuerte preocupación por la seguridad, ya que un 30% de los consultados espera que la primera medida del nuevo gobierno sea la intervención de barrios afectados por el narcotráfico, reforzando la exigencia de señales tempranas y concretas en el combate contra el crimen organizado.
No obstante, la encuesta también advierte sobre los principales desafíos que enfrentará la administración entrante. En ese sentido, la impaciencia ciudadana aparece como la mayor dificultad, con un 36% de los encuestados que anticipa frustración frente a promesas que eventualmente no se cumplan. Esta percepción se instala como un factor de presión permanente para el futuro gabinete, que deberá mostrar resultados en el corto plazo para mantener la confianza pública.
En cuanto al escenario político, Data Influye refleja un panorama opositor fragmentado. Jeannette Jara lidera las menciones como eventual figura de oposición, seguida por Gabriel Boric y otros liderazgos con niveles de apoyo similares. Sin embargo, un porcentaje significativo de los encuestados considera que nadie asumirá claramente ese rol o declara no tener claridad al respecto, lo que da cuenta de un escenario político aún difuso.
Respecto de la lectura del resultado electoral, la ciudadanía se muestra dividida. Un 28% lo interpreta como una expresión de legitimidad democrática, mientras que un 25% lo atribuye a una inconsciencia del electorado y un 17% lo percibe como una posible fuente de descontento social, evidenciando visiones contrapuestas sobre el nuevo ciclo político.
En relación con la administración saliente, la evaluación del presidente Gabriel Boric se mantiene estable, con un 30% de aprobación y un 56% de desaprobación. En el ámbito económico, un 51% de los encuestados proyecta progreso, un 34% estancamiento y un 15% retroceso, mientras que un 42% estima que la recuperación económica tomará más de dos años.
De este modo, y considerando la alta desaprobación del gobierno saliente, junto a una sensación de escasa representación política y expectativas moderadamente optimistas hacia 2026, el presidente electo José Antonio Kast enfrenta un escenario especialmente exigente. En ese contexto, la composición de su gabinete y las primeras decisiones de gobierno serán claves para responder a un clima marcado por altas expectativas ciudadanas y una persistente desconfianza hacia la clase política.
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