Fue el peor partido que pudo haber jugado Universidad de Chile. El equipo de Mauricio Pellegrino perdió 5-2 como local en Santa Laura, sumando su cuarta derrota consecutiva.

La primera etapa fue aburridísima, donde ambos elencos no se hicieron daño y tampoco hubo peligro en las áreas, dejando al cabo de 45 minutos el marcador en 0.

El desarrollo del encuentro fue altamente interrumpido, con varias infracciones y poco fútbol. Cuando el balón estaba dentro de la cancha, hubo mucho fallo en los pases, tanto de los azules como rancagüinos.

En el segundo tiempo todo cambió y no se pareció en nada a lo que se había jugado hasta ese momento que daba más para bostezos que emotividad.

Brian Blando anotó un rápido doblete para abrir la cuenta (60′, 64′), luego Darío Osorio descontó para la U con una buena jugada personal a los 67′, pero Facundo Castro aumentó para el «O’hí O’hí» a los 71′. Nicolás Guerra fue expulsado por reclamar una falta previa en el tercer gol forastero.

El equipo del debutante DT Juan Manuel Azconzábal supo golpear en los momentos precisos al equipo de Pellegrino y supo cuidar su resultado. Así llegarían las últimas dos conquistas de los visitantes mediante Antonio Díaz quien a los 87′ con un gran zapatazo colocaría el 4-1 y Arnaldo Castillo puso el quinto a los 90+3′ con golpe de cabeza.

Al cierre del partido, tras una revisión del VAR, un lanzamiento penal, que fue convertido por Jeison Fuentealba (90+8′), dejó todo 5-2 y cerrando así el compromiso.

De esta manera, Universidad de Chile sumó su cuarta derrota consecutiva que los deja en el octavo lugar con 29 puntos, fuera de los puestos a copas internacionales.

Por su parte, O’Higgins dejó atrás tres derrotas al hilo y llegó a 23 unidades, quedando a cuatro de la zona de descenso.

Por Ignacio Soto Bascuñán