La inflación volvió a subir con fuerza luego de la caída de 0,1% que tuvo en febrero. En marzo de 2023 el Índice de Precios al Consumidor (IPC) anotó una variación mensual de 1,1%, acumulando 1,8% en lo que va del año. Con todo, en su medición en 12 meses los precios continuaron su senda de descenso, pasando de 11,9% a 11,1%.
Entre las divisiones con aumentos en sus precios destacó Educación (10,8%), que tuvo además la mayor incidencia mensual, de 0,659 puntos porcentuales (pp). Esta tuvo aumentos mensuales en sus cinco clases. La más importante fue enseñanza superior con un alza de 12,2% y una incidencia de 0,397 pp, mientras que enseñanza preescolar y enseñanza básica tuvieron un incremento de 12%, cada una, contribuyendo con 0,187 pp -respectivamente- en el IPC total.
En contraposición, alimentos no estuvo dentro de las primeras divisiones que más incidieron en los precios del tercer mes del año, sino que se ubicó en el cuarto lugar: tuvo un alza de 0,4% mensual y una incidencia de 0,97 puntos porcentuales. Además, estuvo por debajo del promedio anual (1,4%) y acelerándose respecto del mes anterior en 0,7%,
Eso es lo que precisamente se verá reflejado en el precio de la Canasta Básica de Alimentos que mide el ministerio de Desarrollo Social mes a mes y que publicará el próximo viernes.
De acuerdo a los cálculos de Clapes UC, en términos mensuales este indicador habría subido en marzo entre 0,2% y 0,7%. Ahora, en su medición anual, la canasta registraría su tercera desaceleración consecutiva. De esta forma, para el tercer mes del año la proyección apunta a una variación entre 19,1% y 19,7%. De concretarse, sería la primera vez después de ocho meses que el incremento anual bajaría del 20%. La última vez fue en junio de 2022.
Con ello, considerando dicha estimación, se puede concluir que el valor de la Canasta Básica de Alimentos subiría desde $64.289 en febrero de 2023, hasta un rango entre $64.418 y $64.739 en marzo de 2023. Si se compara con marzo de 2022, el precio en ese entonces era de $54.101.
Esta evolución cobra relevancia ya que es el parámetro que fijó el gobierno para entregar el aporte complementario para suplir el aumento que vayan teniendo los alimentos, incluido en la negociación por salario mínimo. De esta manera, el subsidio que se entregará en marzo sería de entre $10.317 y $10.638 por carga familiar, a través del Subsidio Único Familiar (SUF) o de la Asignación Familiar al 60% de los hogares de menores recursos.
El informe muestra que, a nivel de productos, en marzo destacaron las alzas en los precios del limón, palta y huevo, mientras que las mayores bajas se registraron en los precios de la manzana, zanahoria y sucedáneo de café.
La Canasta Básica Alimentaria está compuesta por una serie de alimentos que permiten cubrir los requerimientos calóricos y proteicos de una persona con actividad moderada. Esos alimentos no se eligen de manera arbitraria, sino que son el resultado de cuáles son los hábitos de consumo de la población, que es información proporcionada por la VII Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF), levantada por el INE entre diciembre de 2011 y diciembre de 2012. La canasta, entre otras cosas, incluye (en distintas cantidades) carnes, frutas, verduras, hortalizas, pan, leche, fideos, arroz y bebidas no alcohólicas y alcohólicas.
Luego del IPC de 1,1% de marzo, los economistas esperan que la inflación anual caiga de 10% en mayo, aunque algunos no descartan que sea ya en abril. Mientras que las perspectivas para el año que entregó el Banco Central es de 4,6%, y las del mercado se ubican entre 4,5% y 5,3%. Dado ello, es probable que la evolución del precio de la Canasta Básica de Alimentos prosiga también con tendencia a la baja.
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