Equipo Ecoh. Así se llama el nuevo grupo de trabajo del Ministerio Público que estará compuesto por más de 240 profesionales que tendrán la misión de trabajar en hechos relacionados al crimen organizado.
El equipo, que ya está operativo desde este lunes, fue presentado por el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve; el fiscal nacional Ángel Valencia, y representantes de la Policía de Investigaciones y Carabineros, en el Centro de Justicia.
Según se informó, en la Región Metropolitana habrá 40 profesionales. Entre ellos, se dispondrán 16 fiscales adjuntos, que serán coordinados por el fiscal de la Zona Metropolitana Sur Héctor Barros. “Encabezaremos una transformación inédita desde el punto de vista del Ministerio Público”, dijo Barros. En total, serán 65 fiscales los que compondrán este equipo.
Así las cosas, se especializarán en delitos de alta gravedad: secuestros con homicidio, violación o lesiones; secuestros extorsivos tanto de adultos como de menores de edad, homicidios simples y calificados, robos con homicidios y homicidios de funcionarios públicos. Eso sí, estos delitos pueden irse modificando con el tiempo.
Los fiscales contarán con turnos 24/7 y efectuarán la constitución inmediata en el sitio del suceso de determinados hechos. Barros explicó que los casos que tome este equipo serán investigados desde el inicio hasta la etapa de formalización, para luego ser tomados por cada fiscalía regional.
Barros hizo una comparación entre este nuevo equipo de la fiscalía y lo que fue el inicio de la reforma procesal penal, que comenzó en 2000. “Lo conversábamos anoche incluso con el fiscal nacional cuando empezaban a funcionar los equipos. Siempre nos ocupamos plenamente en cada detalle de su implementación en lo que significaba liderar un proceso de cambio trascendental en el sistema de justicia penal en Chile. Hoy estamos siendo protagonistas de un nuevo proceso de cambio, uno muy distinto al que abordamos al inicio de la reforma procesal penal que en cuanto a delitos de complejidad estaba caracterizado en su mayoría por la comisión de ilícitos comunes, donde la criminalidad organizada era casi en su totalidad de índole nacional, salvo en lo relativo al tráfico transnacional de droga desde los países vecinos. Pero ese escenario ha cambiado”.
“Queremos llegar más luego a los sitios del suceso”, dijo por su parte, el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, quien afirmó que la tendencia al alza de los homicidios ha ido quebrándose. Según cifras de gobierno, al 5 de noviembre de 2022 habían ocurrido 1.033 homicidios en Chile. Este año, a esa fecha, han ocurrido 928. En ese sentido, Monsalve destacó la implementación de las medidas del Ejecutivo, como el Plan Calles Sin Violencia.
Finalmente, el fiscal nacional destacó: “Este proyecto, que se fue desarrollado en el marco del Plan Calles Sin Violencia del Ministerio del Interior, refleja el firme compromiso del Ministerio Público en la coordinación de la persecución penal”.
“Nos enfrentamos a un nuevo desafío y a un cambio de paradigma en el trabajo de la fiscalía de Chile. Y, asimismo, de las fuerzas de orden. Las manifestaciones criminales en nuestro país son cada vez más violentas y complejas con la presencia de organizaciones que actúan articuladamente con una planificación a largo plazo”, agregó Valencia.
En ese sentido, Valencia señaló: “Hemos observado nuevas tendencias delictivas que, hasta la fecha, resultaban atípicas o poco frecuentes, como extorsiones, secuestros, trata de personas, tráfico de migrantes, armas y narcotráfico de dimensiones que no conocíamos”. “Este proyecto viene a mejorar la persecución penal del delito de homicidio, secuestros y sus delitos asociados, especialmente aquellos cometidos en el contexto de la criminalidad organizada”.
La presentación se da a cinco días de que se originara un secuestro en Rancagua, Región de O’Higgins. Allí un empresario fue raptado por un grupo de delincuentes, que lo sacaron desde su empresa dedica al rubro de los fierros. Lo mantuvieron en cautiverio por 38 horas. Carabineros detuvo a tres sujetos, dos venezolanos y un colombiano, que quedaron en prisión preventiva.
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