Tres minutos antes de las 9.00, el expresidente Sebastián Piñera llegó junto a su esposa, Cecilia Morel, hasta el Liceo Rafael Sotomayor, en Las Condes, para emitir su sufragio en el plebiscito constitucional.
Luego, a las 9.10, tras sufragar, y sacarse fotos con algunos votantes que se encontraban en el liceo a esa hora, el exmandatario entregó sus impresiones del proceso.
“Aunque hace un poco de frío, espero que 15 millones de chilenos y chilenas podamos concurrir a las urnas y expresar nuestra opinión, nuestra preferencia. Todos los votos importan. El voto no solamente es un derecho, también es un deber. Espero que los chilenos y chilenas concurran a votar y así tengamos la posibilidad de tener por fin, después de cuatro años de tanta inestabilidad, de tanta incertidumbre, de tanta confrontación, una Constitución aprobada en plena democracia, que nos dé la estabilidad, la unidad, la proyección que Chile necesita”, dijo de entrada.
Seguido, Piñera señaló que el país necesita “estabilidad y unidad” para “empezar a ganarle la batalla a la delincuencia” y poder darle “a las familias chilenas mayor seguridad”.
Por otro lado, dijo, la “otra gran misión” es “sacar a Chile del pantano y ponerlo nuevamente en marcha. Que volvamos a crecer, a crear empleos, a innovar, a emprender, a invertir”.
“Darle seguridad a chilenos y darle oportunidad a los chilenos son las dos grandes causas y desafíos que tenemos hoy día”, agregó.
“Para mañana, yo creo que Chile no puede seguir con esta incertidumbre que ya lleva cuatro años, que ha costado tanto en términos de sacrificios e incertidumbre. Espero que aprovechemos esta oportunidad para aprobar una Constitución en plena democracia”, añadió.
En su visión, el exjefe de Estado hizo un repaso de la actualidad del país: “Una de las dos mejores opciones, y ustedes saben cuál es, cierra mejor el proceso, nos da mejores herramientas y mejores oportunidades para empezar a derrotar a la delincuencia y a la violencia que están desatadas en nuestro país. Y salir del pantano. Un país que está muy estancado. Hoy Chile está peor que hace dos años atrás. Es un país más dividido, más inseguro, con más violencia, está estancado económicamente, no es capaz de crecer ni crear empleos, tenemos un grave problema de calidad en la educación, tenemos más de dos millones de chilenas y chilenos en lista de espera, esperando atención de salud. Ese no es el Chile que queremos”.
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