La Roja no pudo tener un mejor estreno en el Mundial Sub 20. La selección chilena venció por 2-1 a Nueva Zelanda con un agónico gol de Ian Garguez, quien marcó en el cierre y así poder soñar con esta Roja.
Las acciones del partido comenzaron a favor de Chile, por medio de Lautaro Millán a los 8 minutos. El volante de Independiente probó con un tiro desde afuera que se fue desviado por un costado de la portería.
A los 32′, Gillion disparó desde la media luna del área, con un remate que se fue elevado por poco.
A los 42 minutos, Bastian Arce recupera un balón en el mediocampo y asiste de buena manera a Emiliano Ramos, que no puede ante el achique del guardameta neozelandés. Así se irían al descanso.
El arranque del segundo tiempo comenzó errático para el equipo local, puesto que la visita se generó dos oportunidades claras para convertir, pero la gran actuación del portero de Huachipato, Sebastián Mella, mantuvo el arco en 0.
A los 55´, por fin caería el gol chileno. El error en la salida es del volante Fergus Gillion y Agustín Arce, de gran partido asiste a Lautaro Millán, que anota entrando al área.
Con el transcurrir de los minutos, Chile no supo gestionar la victoria momentánea y los cambios realizados por Córdova no dieron resultado.
Fue así como en el minuto 80 se cobra penal a favor del cuadro oceánico. Nathan Walker, que llevaba dos minutos en cancha, agarró un balón en control dominado y, cuando iba entrando al área, Matías Pérez lo tocó abajo y el juez bosnio cobró la pena máxima. El mismo Walker se paró frente al balón y puso la igualdad.
Cuando el partido ya se terminaba, Chile logró el segundo tanto. El cuadro neozelandés que no despeja el balón, hay un error entre el volante Finn McKenlay y el portero Henry Gray, y es ahí donde lo aprovecha el central de Palestino Ian Garguez para desatar el delirio del público chileno.
Por Ignacio Soto Bascuñán